SAN JUAN DE SABINAS, COAH.– Bajo el argumento de que contamina el ambiente, y podría provocar accidentes por un eventual incendio, es que la Comisión Federal de Electricidad (CFE), pretendía sacar la mañana de este jueves cargamentos de carbón de la mina Pasta de Conchos hacia las plantas carboeléctricas de la paraestatal en Nava.

La maniobra fue truncada en parte, por un grupo de viudas, quienes evitaron que cinco camiones salieran del complejo siniestrado, pero otras siete unidades ya lo habían logrado.

Claudia Escobar, esposa del minero Raúl Villasana, consideró que esta es una situación que no debe pasar, toda vez que explicó que “en la minuta que se firmó con el presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando inició el proyecto de recuperación de restos, se asentó que no se iba a movilizar ni a comercializar mineral, sino hasta que se lograra el rescate”.

La explicación que dan los encargados del proyecto en lo local, es que primeramente se trata de rezaga (material resultante de la limpieza de los trabajos y las áreas siniestradas), y luego que la Secretaría de Economía, permitió dichas maniobras en base a una orden de parte de autoridades ambientales, y al riesgo de accidentes por un posible incendio del carbón.

Sin embargo, agregó que se cuenta en el lugar, con un patio para el almacenamiento seguro del mineral.

Molesta, agregó que mientras el rescate sí se puede retrasar ya que restaurar las galerías siniestradas tardará mucho tiempo, no se dificulta lo que dijo es un robo de carbón, del que CFE sería dueño una vez logrado el rescate.

El grupo de viudas, logró evitar que cinco unidades cargadas de carbón salieran de la mina, mientras no se les exhiba la carta que dicen trae una orden presidencial, y que significaría que López Obrador retrocede la palabra que sobre el tema, empeñó ante las familias.

Agregó que para que el carbón vaya a Nava, la CFE debe tener la concesión correspondiente.

Los deudos, esperan la respuesta de la Secretaría del Trabajo, para sostener una reunión virtual en la que se explique los motivos de la movilización del carbón, y se les muestre la documentación que los acredita para hacerlo, “sin embargo para nosotros eso no será suficiente”, subrayó Escobar Pacheco.

Señaló que es muy probable que el ingreso de unidades a la mina, haya sido durante la noche y a escondidas, ya que muy temprano por la mañana inició la caravana de camiones ya de salida.

Al haber devuelto a su lugar los últimos camiones con razón social Transportes y Maquinaria Río Grande-Traymaq de Piedras Negras, las familias se retiraron de la mina, pero exigen que funcionarios de la STyPS, se hagan presentes para dar solución a la situación.

Claudia Escobar agregó que tan sólo de los trabajos en proceso para conectar a la lumbrera número 1, se estima que vayan a resultar unas 5 mil toneladas de carbón.