En conferencia de prensa, un grupo de viudas de mineros caídos en Pasta de Conchos el 19 de febrero de 2006, pidieron que tanto la activista Cristina Auerbach y el obispo de la Diócesis de Saltillo, Raúl Vera, se hagan un lado y permitan la recuperación de restos de 63 de los 65 trabajadores ahí atrapados.

Entre las viudas, Tomasita Martínez dijo tener la esperanza de que tanto el Sindicato Minero Nacional que preside el senador Napoleón Gómez Urrutia, y el Gobierno Federal logren tan anhelado hecho, tal y como lo prometieron en su momento.

Y es que además recordaron que 15 días antes de que se registrara el accidente, el propio Obispo Vera López ingresó a la mina, y si bien conoció las condiciones de inseguridad en dicho centro de trabajo, nunca las dio a conocer o denunció, lo que fue considerado como una omisión de su parte.

“Ambos aseguran buscar el rescate, pero no lo han logrado, ahora se lo quieren adjudicar”, aseveraron las viudas al tiempo de admitir que se desconoce la fecha en la que se obtendría la recuperación de los restos de los trabajadores caídos.

Aseguraron tener pruebas de que Auerbach lucra con el dolor de los deudos, por lo que expresaron que “están a punto de que se les acabe su minita de oro”.

Y aunque reconocieron que la viuda Elvira Martínez (quien apoya al Obispo y a Auerbach) tiene derechos sobre el rescate pues su esposo permanece atrapado en el interior de dicho complejo minero, la activista y Raúl Vera nada tienen que hacer al respecto, y por el contrario solo obstruyen dichas acciones.

En la conferencia estuvieron además las viudas: María Guadalupe Hernández Leyva, Elizabeth Castillo, Claudia Escobar Pacheco, Yolanda González, y Ana Celia Morales Villa.