Como muy necesario para un buen cierre económico de año para la región Carbonífera, consideró el gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme, el contrato emergente que la CFE otorgó a los productores de carbón, para el suministro del mineral a las plantas generadoras de electricidad de la paraestatal en Nava.

Y es que en entrevista, el Mandatario Estatal, dijo que la situación económica regional por la falta de venta de carbón, comenzó a generar despidos para quienes se dedican a la labor de extracción del mineral, generado una crisis que se resolvería con el pedido de 80 mil toneladas para el cierre del presente año.

Mientras que sería a finales de diciembre e inicios de enero cuando se licite un pedido anual por 1.2 millones de toneladas de carbón, volumen que aumentaría gradualmente hasta alcanzar los 2 millones de toneladas.

El hecho potencializará a la región, dando un drástico cambio en su dinámica económica que la estabilice.

Lo anterior debido a que después de dos o tres grandes productores de carbón, son los pequeños y medianos productores del mineral quienes sustentan la microeconomía de la región, hacia el consumo interno, con impacto directo en el sustento de los hogares y comercio local.