El Custodio honorario de monumentos y sitios históricos en Sabinas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Ramiro Flores Morales catalogó la caída de la chimenea de la villa de Agujita como una tragedia y un golpe a la historia de la región Carbonífera, pues era un monumento testigo del apogeo que tuvo esta zona de Coahuila con la explotación del carbón durante el siglo XX. 

El también cronista e historiador local, dijo que más que por los vientos y la lluvia, la chimenea se derrumbó por el vandalismo de que fue objeto, y que provocó la destrucción de las zapatas por la operación de un tajo cercano; así como por el robo de cables que sostenían la estructura de 55 metros de largo por 2.8 metros de diámetro, conformados en su interior por ladrillos refractarios y en el exterior por lámina de acero.

La chimenea se construyó en el año de 1906, por la empresa Compañía Carbonífera Agujita, S. A., con el propósito de emanar el humo tóxico de 400 hornos tipo colmena, coquizadores de carbón, por lo que además el entrevistado aprovechó para aclarar que dicho material es sumamente nocivo por contener uranio, torio y otros elementos pesados, por lo que no debería ser utilizado por las personas que han recogido dichos restos con la intención de construir chimeneas o asadores en sus viviendas.

Dicho monumento ubicado en terrenos propiedad del gobierno del Estado, fue catalogado por el INAH como propiedad de la nación, por lo que aseguró que se vigilará que sus restos no sean más vandalizados.

Mientras que vecinos del sector, se congregaron para dar testimonio del colapso de dicho monumento reducido a ruinas, y en el caso de Anastacio Rico consideró que la existencia de dicha chimenea, era un riesgo para los habitantes cercanos, que escucharon un fuerte estruendo por la caída de la estructura, y de la que una parte quedó en el interior de un tajo cercano.

En tanto que el director de Protección Civil Municipal, José Pichardo admitió que faltaba tensión a la estructura por haberle sustraído los ladrillos de la base, y demás materiales que la componían, considerando que la velocidad de los vientos no fueron determinantes para que cayera, pues había soportado vientos de más velocidad a los registrados el lunes.